Mostrando entradas con la etiqueta amor. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta amor. Mostrar todas las entradas

jueves, 31 de diciembre de 2015

2015, el año que recordaré toda mi vida

Hoy es un día muy especial, no sólo porque es el último día del año, sino también porque justamente hoy, hace 1 año, ya sabíamos a estas horas que íbamos a ser papis.

Recuerdo ese día como si fuera ayer, con todo lujo de detalles. La noche del 30 de diciembre me fui a dormir encontrándome bastante mal. Sobre las 4 de la mañana me desperté para ir al baño y me hice nuevamente el test de embarazo, ya que 1 semana antes me dio negativo, pero mi amiga seguía sin bajar. 

Fueron minutos de nervios mezclados con alegría. Estuve sola en el baño, sentada esperando el resultado, sin apenas hacer ruido porque no quería despertar a mi Mixto. Cuando pasaron los minutos y vi que estaba embarazada, me invadió una alegría que nunca antes había sentido. No sabía qué hacer, si saltar, si llorar, si gritar, si despertar a mi Mixto o no. Al final decidí no despertarle, así que imaginaros cómo me metí en la cama de nuevo: temblando de la emoción, evitando por todos los medios hacer ruido y una vez tapada con el edredón (no podía cerrar los ojos ya que el sueño se me fue de golpe), los ojos como platos en la oscuridad absoluta de nuestra habitación.

No sé cuántos minutos pasaron, pero Mixto se despertó porque se fue a dormir preocupado por mi ya que me encontraba mal y al notar que estaba despierta me preguntó: - ¿Estás bien?  Y yo: - Sí... ¡Estoy embarazada! Y Mixto: - Ah vale, ... ¿Cómo? ¿En serio? ¡Qué fuerte! ¡Qué emoción!

En ese momento empezó nuestra conversación en medio de la noche. Los dos teníamos que trabajar ese día pero no nos importó. Hablamos y hablamos mucho rato, imaginando nuestra vida con Mixtito.

Fuimos a trabajar con unas ojeras hasta el suelo, pero con una sonrisa dibujada en la cara que aún nos dura a día de hoy. Estuvimos todo el día whatsappeándonos sin parar, continuando con la conversación que empezamos esa madrugada.

Ese día se lo comunicamos a la familia más cercana y felicidad y emoción son palabras que se quedan cortas para describir sus reacciones. A mi Mari casi le da algo y al darle la noticia justo antes de la cena de Nochevieja, estaba tan emocionada que no podía concentrarse en preparar la cena. Normal, si es que era un notición :) Mis hermanas estaban locas de contentas y mis churrys me hicieron llorar con su emoción desmedida.

Ahora cada día 31, recordaré todo esto como si fuera ayer.

2015 ha sido el año en el que Mixtito creció dentro de mí y nació. Ha sido el año más emocionante de mi vida. Ha sido el año en el que descubrí muchas cosas que no pensaba que iba a sentir jamás. Ha sido el año en el cual mejor me he sentido. Y ha sido el año en el que empiezo a aprender a ser mamá.

Mi balance del 2015 eres tú, mi Mixtito. Ya nada volverá a ser como antes, pero yo estoy feliz por ello. Estamos felices por ello. Porque tú eres nuestra alegría y nuestra felicidad. ¡Y que esta sensación no acabe jamás, por favor!



martes, 15 de diciembre de 2015

Sesión de fotos de Mixtito con Larysa Charnakal Photography

Como bien sabéis, soy una enfermiza de las fotos. Le hago fotos a todo, sobretodo a lo que como, lo que cocino y ahora a mi Mixtito.

Tengo el móvil que me va a estallar de tantas fotos. Antes, hacía un vaciado cada 2 o 3 meses pero ahora, como no lo haga antes del mes, mi móvil sufre las consecuencias de la falta de memoria :P

Cuando me quedé embarazada, ya deseaba hacer una sesión de fotos de embarazo con mi Mixto, pero al ver la que se nos venía encima económicamente hablando, decidimos no hacer la sesión. Por eso cuando Mixto llegó un día a casa diciendo que su compañero de trabajo le había regalado una sesión de fotos para Ían, casi me muero de la emoción. Es uno de los regalos que más ilusión me ha hecho, así que desde aquí, os doy las gracias Xavi y Susana por este regalazo.


Quienes me seguís en Facebook e Instagram ya habréis visto alguna que otra foto de la sesión, pero quería dedicarle un post a Larysa, porque se lo merece.

Estamos encantados con el resultado y no sólo eso. Ella es súper tierna, y en todo momento estuvo muy atenta a las necesidades de Ían, ya que se cansaba y lloraba de vez en cuando porque quería dormir, y nosotros venga a cambiarle de ropa y hacerle posar ante la cámara. ¡Pobrecito mío!


Vino un domingo por la mañana a casa y en nuestra habitación, que es donde más luz entra, hizo la mayoría de las fotos:










¿Veis el gorrito de panda que lleva? Le hice en su día un conjuntito con un gorro y una ranita a juego para recién nacido, pero cuando se lo fuimos a poner, ya le iba pequeño así que ni lo estrené. Tuve que hacerle un gorrito más grande deprisa y corriendo para que pudiera llevar en la sesión. Y por suerte llegué a tiempo. ¿A que le queda bien? Qué voy a decir yo, ejem ejem :P

Al final Mixtito cayó rendido en su orca de Babybites, que por cierto, nos encanta. Mixtito duerme dentro de la orca en su mini cuna y es lo que mejor va, porque el nórdico que le compramos para la mini cuna va bien, pero se destapa con mucha facilidad. En cambio con la orca, está resguardadito y no se destapa.


¿Os han gustado las fotos? Seguro que sí porque son preciosas :) Por si queréis regalar alguna sesión o hacer una a vuestros peques, os dejo la página de Facebook de Larysa Charnakal Photography, para que podáis contactar con ella. ¡No os defraudará! 

Mixtito me ha dicho que os desee Feliz Navidad. Está muy ilusionado con su primera Navidad. ¡Y nosotros aún más! Qué paséis unas bonitas fiestas rodeados de los vuestros.



martes, 17 de noviembre de 2015

Ya nada volverá a ser como antes

Cuando estaba embarazada, la gente no paraba de repetirme que ser madre es una experiencia maravillosa. Lo es, sin ningún tipo de duda, pero nadie te dice lo durísimo que es también. Es maravilloso y duro a la vez, pero supongo que con el paso del tiempo, a la gente se le olvida lo duro y se acuerda sólo de lo maravilloso.

La parte maravillosa todos os la podréis imaginar: una sonrisa de tu peque, un balbuceo, un suspiro o una mirada. Querer como nunca antes has querido. Pensar y darte cuenta de que es parte de los dos... Cualquiera de estas cosas hacen que merezca la pena.

Lo que nadie te cuenta es la parte menos bonita, sobretodo las primeras semanas.

Con sólo 5 días, tuvimos un mini susto y nos dimos cuenta de lo duro que es ser padres. De golpe entendimos mucho más a nuestros padres y la preocupación desmedida que suelen tener por nosotros.

Por suerte Mixtito no se porta mal y no es un niño que llore mucho, pero las primeras semanas fueron duras más que nada por el tema sueño. No duraba más de 2 horas entre toma y toma y claro, se me solapaban las tomas haciendo que no durmiera apenas por las noches. Poco a poco la cosa ha ido cambiando y ahora Mixtito dura entre 4 y 5 horas después de la última toma, aunque la última toma es tardía, sobre las 12 de la noche.

Si es que ya sabía yo que me iba a salir guerrero por las noches. Él se encargó de prepararme mientras estaba dentro todavía. No había noche que me dejara dormir tranquila. Ahora le cuesta coger el sueño, pero una vez lo coge, es un angelito y un santo.

La parte buena es que te das cuenta de que dormir está sobre valorado y que en realidad, no necesitamos dormir tantas horas. Con 4 o 5 tenemos más que suficiente :P

La falta de tiempo hace también que te organices cómo puedas y aproveches cada minuto para que no sobre ni uno solo al cabo del día. Un buen ejemplo, en mi caso, es que aprovecho las tomas de la madrugada para hacer punto o ganchillo y no dormirme mientras Mixtito hace el reposo, escribo posts con una sola mano y en la ducha, cuando antes me ponía primero el champú, luego el gel, luego el limpiador de la cara, etc, me lo pongo todo junto y a la vez y así, acabo antes, vamos, que estoy haciendo un máster avanzado en gestión del tiempo. Mejor esto que nada, positivismo ante todo.

Todo esto, como he comentado antes, se te pasa con caritas como esta:

Noches en vela
Nuestro peque ya tiene 2 meses y medio y tenemos ganas ya que llegue a los 3 para ver si sufre menos por las noches con los gases y cólicos nocturnos. No llora por ello pero sí que le cuesta conciliar el sueño debido a esto. 

Mixto va más allá. Él ya desea que ande y hable para que puedan jugar juntos, sobretodo a videojuegos y poder enseñarle los dibujos de antes. Sueña con ir al parque los 3, hacer excursiones y viajes juntos y ver muchísimas películas los 3.

Todo llega Mixto, y antes de que nos demos cuenta, Mixtito ya andará y estaremos todo el día detrás persiguiéndole.

Nuestra vida anterior no volverá nunca, pero no importa, porque nuestra vida de ahora es mucho mejor, diferente pero mejor.

domingo, 20 de septiembre de 2015

Bienvenido al Mundo Ían

El 2 de Septiembre de 2015 a las 22.36 horas, nació nuestro querido Mixtito en Barcelona.

Desde ese día nuestra vida ha dado un giro radical, para bien por supuesto, pero es completamente diferente a nuestra vida anterior.

El mismo día 2 por la mañana tuve visita con mi médico y me dijo que estaba todo bien y que si dentro de 1 semana no había nacido Ían todavía, me programarían una inducción para traerlo al Mundo. Ese mismo día me encontraba tan bien, que antes de comer lo que preparé para comer, cogí mi cámara y todo para fotografiar el plato y guardarlo en mi carpeta de "recetas por publicar" de Tupper's Moment. Fue acabar de comer, ir al baño y notar algo extraño. Algo que no era pipí pero tampoco estaba segura si era o no era romper aguas. 

Decidí esperar un poco, pero a la que di unos cuantos pasos más, más líquido perdía, así que supuse que algo pasaba. Eso sí, seguía sin estar segura si lo que me estaba pasando era romper aguas. Yo tenía entendido que romper aguas era romper la bolsa de golpe, era perder todo el líquido en un único "xof".

Lo primero que hice fue llamar a mi Mixto y decirle : "Creo que he roto aguas" Y él, "¿Cómo que crees? ¿Has roto o no has roto? Y allí empezó todo. 

Cogí un taxi hacia la clínica y una vez en urgencias, me confirmaron que había roto aguas pero que estaba muy verde y sin dilatar, así que me provocarían la dilatación. Vinieron mi Veri y mi mami hasta que llegó Mixto y pudo estar a mi lado en la sala de partos.

Fueron 7 horas en total, 2 de las cuales fueron las más duras por el dolor, pero no hay nada que no alivie la epidural. ¡Bendita epidural! Desde aquí admiro a las mujeres que deciden hacerlo sin o a las mamis de antes, que no tenían más remedio. Si pensaba que aguantaba bien el dolor (ese ha sido mi discurso en el embarazo) me equivocaba, porque este dolor no hay quien lo aguante, al menos yo no. En el momento piensas, "no voy a tener ningún hij@ más" pero cuando ves a esa cosita encima tuyo, cuando le oyes, cuando le tocas, cuando le sientes, todo, absolutamente todo se te olvida y volverías a hacerlo las veces que hicieran falta. ¿Qué són 2 horitas de sufrimiento si luego lo tienes en brazos acurrucadito?

Esa misma noche no pudimos pegar ojo, no porque el pequeño no nos dejara sino por la emoción de ser papás. No podía parar de pensar, de mirarle y emocionarme, de preguntarme cómo es posible querer de esta manera. Y un pensamiento lleva a otro, y piensas en la típica frase que todas las madres del Mundo han dicho a sus hijos: "Cuando seas madre, lo entenderás". Y tanto que lo entiendo mami, no sabes cuánto.

Los días en la clínica fueron días intensos, de aprendizaje continuo gracias al gran equipo de la clínica. No nos pudieron tratar mejor, de verdad. Y de emociones, muchas emociones que no podía controlar. Llorar fue lo que más hice creo. Era mirarle y llorar. De hecho cuando estaba de parto, antes de que saliera ya estaba llorando de la emoción... Si es que soy de llorar fácil, no tengo remedio.

Hoy nuestro pequeño ya tiene 18 días y está mejor que bien. Se porta bastante bien aunque como todos los niños, tiene días tontos, bueno mejor dicho noches tontas, porque por el día duerme muy a gusto él. Y a nosotros se nos cae la baba con nuestro Mixtito. 

Ha provocado una revolución en la familia. Las yayas están muertas de amor y de emoción, hasta mi padre está emocionado y eso que no es un hombre que exprese mucho sus sentimientos. La titas están como locas con él y nuestros amigos y el resto de la familia también. 

Sabíamos que sería bonito esto de ser papis, pero al menos yo, no imaginaba tal magnitud. 

Nunca pensé que tener un hijo sería la experiencia más bonita del Mundo, y mira que todas las mamis te lo dicen pero no crees que es para tanto hasta que lo vives. Una experiencia que sólo puedes entender viviéndola.

Y nosotros seguiremos con nuestra felicidad desmedida, disfrutando de cada instante que nos regale nuestro pequeño Ían.






martes, 25 de agosto de 2015

Regalitos para Ían

A estas alturas del embarazo (ya estoy en la semana 38), ya tenemos todo listo para Ían.

En este aspecto, hemos tenido mucha ayuda de la familia por suerte y desde aquí les agradezco un montón todos los regalitos que nos han hecho, mejor dicho, que le han hecho a Mixtito porque todo es para él. Desde luego, no ha nacido todavía y tiene un montón de cosas para estrenar y encima una habitación para él sólo... :P

Ya os comenté en este post la bolsa que escogimos para la clínica y que nos regalaron mis churrys, junto al cambiador y el porta biberones a juego, aparte de una mega canastilla con cosas varias para mi Ían, desde ropa hasta pañales. Si es que son tan guapos mis churrys.

Mi Mari, la mami de mi Mixto nos ha hecho un súper regalo: el carrito de mi Ían y ropita para la canastilla. Después de mirar en tiendas y por internet, nos decidimos por este modelo, ya que como soy una caprichosa y me conozco, quería elegir un modelo al cual pudiera ponerle fundas con estampados monos, como los de Fun*das Bcn, aunque no le hemos comprado ninguna, pero por si acaso. Me gustaba mucho el carro que tiene la mitad de la población, el Bugaboo pero al ser tan caro desistí. Navegando por la red, encontré el post de Little Miss donde hablaba del Anne 2 de Borsino Baby. Y nos convenció totalmente, así que compramos el pack 3 en 1. Es una empresa española y como podéis ver, es muy muy parecido al Bugaboo. Lo "malo" es que no tienen tienda física donde puedas ver el carro, pero os aseguro que la calidad es impecable y que tienen un servicio al cliente buenísimo.

Pack 3 en 1 Anne 2 de Borsino Baby

Lo que sí hemos comprado en Fun*das Bcn es el bolsito para el carrito, concretamente este.

Mi mami nos dio dineritos para comprar cosas varias a Ían y nos ha ido muy bien para comprarle los muebles y para el tema de la mudanza.

Mis hermanitas nos han regalado unas cosas preciosas. Mi Minyita nos ha regalado la hamaca de Ían, la Babybjörn Balance Soft. Es una pasada, nos encanta. Mi Caulli nos ha regalado el saquito orca de Babybites, que nos tiene enamorados. ¡Es tan bonito! Y mi Veri nos ha regalado una mochila portabebés Manduca, la cual tenemos muchas ganas de estrenar con Ían. Además con el reductor se puede usar desde recién nacido. 


Aparte de estos regalos, Cris y Dani, Albert y Ana, la mamá de Dani, Dani, Margot y mi Lauri, nos han regalado ropita para Ían y la mami de Elia también. Y mis tías de Hong Kong nos han regalado varios bodys molones de allí. ¡Qué ganas de estrenarlo todo!

Nosotros le hemos comprado un montón de cosas también, como imaginaréis. No sabía que un bebé necesitara tantísimas cosas. Pero ya está. Se acabaron los días de "me falta esto, me falta lo otro" porque Ían ya está al caer y lo tiene todo listo para que venga al mundo. 

Cada vez noto que está más cerca el momento. Él ya está muy incómodo y yo también. Tenemos muchas ganas de verte, mi Ían, y estamos todos ya impacientes y ansiosos por verte la carita y por inundarte a besos y mimos.

jueves, 23 de julio de 2015

33 semanas y los diferentes miedos de una embarazada.

Empieza la cuenta atrás, ahora sí que es inevitable enfocar más todo hacia el momento en que Ían venga al mundo.

Durante estas 33 semanas, la gente me ha ido preguntando muchas cosas, entre ellas si tenía miedo al parto. Los que me conocen bien saben que antes de querer traer una vida al mundo, yo era de las típicas chicas con un miedo atroz al parto, más bien pánico diría yo y por eso no me animé antes.

Ahora tampoco es que haya cambiado mucho la cosa. Se acerca el momento y cada vez tengo un poquito más de miedo, aunque ya no lo definiría como pánico. En mi caso, me ha ayudado mucho la información que me están dando en las clases preparto, donde me lo explican todo con pelos y señales y sin saltarse nada, por desagradable que sea, pero eso no evita el miedo a lo desconocido.

Mi miedo no es por el dolor, eso es lo de menos en mi opinión, es el miedo a un cúmulo de cosas que podrían suceder, o al menos eso piensa mi cabecita loca.

Mi primera preocupación es si sabré reconocer que estoy de parto. Sí, supongo que sí y con la de veces que me lo han explicado, creo ser capaz de reconocerlo, sobretodo en el hipotético caso en que no rompa bolsa de aguas y me den contracciones antes de romper la bolsa o que no se rompa y me la tengan que romper en la clínica. No me gustaría estar las últimas semanas yendo a la clínica con falsas alarmas :)

¿Nacerá bien? Ese es otro de mis súper miedos y supongo que inevitable para cualquier futuro papi o mami. No sé por qué me preocupo si me controlan súper bien en la clínica y la verdad es que me tratan muy bien. Y me dicen y repiten que todo va estupendamente, de hecho no he tenido ningún percance ni alteración ni nada de nada, así que no se por qué sigo dándole vueltas, pero no lo puedo evitar.

El post parto me tiene loquita. Que si los puntos, que si la teta fuera todo el día. ¿Me subirá la leche? ¿Le tendré que dar biberón cuando quiero darle el pecho? ¿Sabré curarle el ombliguito bien? Y así podría estar todo el día y parte del día de mañana haciéndome preguntas de este tipo. Sé que lo haremos lo mejor que sepamos, tanto mi Mixto como yo, pero también son inevitables todas estas preguntas.

También me agobia mucho el tema visitas tanto al parir como después en casa. Por suerte mi Mixto comparte mi opinión y para que no sea un festival mi habitación, lo controlaremos muy mucho, pero a ver cómo sale la cosa, que la gente se vuelve loca cuando nace un bebé, como si no hubieran más días para verlo que esos dos o tres días que pasas en la clínica. Y en casa ya tenemos una táctica infalible pensada jejeje.

El otro día en la clase preparto, una de las chicas estaba muy preocupada porque ella vive como a 40 minutos de la clínica y claro, su mayor miedo es no llegar a tiempo a la clínica para que le puedan poner la epidural, ya que pasado un rango de contracciones digamos, no te la pueden poner. También estaba preocupada por si le cambiaban al niño y le habían dicho que le hiciera una marca al bebé con un boli o algo en alguna parte, para identificarlo... Pues bien, suena a chiste pero añadió a mi lista una preocupación más. Sé y nos lo han explicado mil veces, que en esos temas son súper estrictos siempre y que lo primero que hacen es ponerle la pulserita al niño o niña, que esas cosas ya no pasan ahora pero, que alguien me diga cómo se controlan los pensamientos y miedos de una embarazada. Si alguien sabe que por favor venga a mi casa y me haga terapia :P

Podría pasarme toda la tarde hablando de mis miedos y preocupaciones, pero por hoy, os voy a dejar tranquil@s.

Sólo deciros que Ían está muy bien, que sigue siendo un bailongo, que no para de crecer y cada vez me pesa más. Y que las noches son como un macro festival para él con el consiguiente insomnio y molestia para mí. Pero no me importa porque cada vez que pienso en el día en que lo vea por primera vez, se me quita todo de golpe. Y ya sin verlo ni conocerlo aún, sé con certeza que todo ha valido la pena.

Ían con 28 semanas, posando para la ecografía :)

jueves, 2 de julio de 2015

Sin ti, no sería nada

Todo el mundo me dice que al estar embarazada mi humor cambiará a peor y que estaré más irritable. Teniendo en cuenta que yo ya normalmente soy de pronto fácil, creo que en ese aspecto, estoy igual, sólo que como estoy en estado, la gente piensa que mi mala leche es debido al embarazo.

Yo lo veo de otra manera porque realmente me siento mucho mejor que normalmente, anímicamente hablando. Me siento feliz, tranquila y sobretodo muy ilusionada y yo misma pienso muchas veces que me tomo las cosas mucho mejor que siempre. Pero bueno, esto habría que consultarlo a mi Mixto y a mi entorno. ¿Qué opináis? Quizá he desarrollado un súper poder de tergiversar la visión de las cosas, quién sabe... :P

Sin darme casi cuenta, ya estoy de 30 semanas. ¡Madre mía, cómo pasa el tiempo! El tiempo pasa volando, tanto que no me ha dado tiempo a preparar la canastilla al completo aún, aunque no os preocupéis, que sólo me falta ultimar los detalles y todo listo. Aún recuerdo esos primeros meses fatales que pasé. Esos sí se me hicieron eternos, pero fue pasarlos y todo fue rápido, bien y bonito. Casi todo, tampoco quiero mentir.

En toda esta felicidad y tranquilidad sin duda entra mi Mixto. ¿Qué os he dicho ya que no sepáis de él? Es mirarle y saber que es LA PERSONA. Es verle y saber que va a estar allí conmigo, pase lo que pase. Es pedir algo por mi boquita caprichosa (que ahora lo es mucho más) y en un santiamén tenerlo delante. Es amor del bueno, es lo mejor de este mundo y es todo lo que necesito para continuar, pase lo que pase, ponga quien se ponga y ocurra lo que ocurra. Es mi fuerza, mis ganas, mi todo absolutamente.

A veces pienso que soy demasiado afortunada por tenerle en mi vida. No puede cuidarme, mimarme y amarme más. Y por eso el título de este post, "Sin ti, no sería nada".

Sé que lo haremos bien, porque con esa ternura con la que le hablas todas las noches, ese amor y cariño que desprendes en todo lo que haces por nosotros sólo puede hacer que las cosas salgan bien, porque las cosas hechas desde dentro, desde el corazón, nunca salen mal. Y con amor verdadero mucho menos. Así que no te preocupes, iremos de la mano en todo lo que hagamos e Ían te adorará, tanto como te adoro yo.

Y nacerá otro de los amores de nuestras vidas, el que ya estamos empezando a sentir juntos por él, siempre de la mano.

Queda poquito para verte Ían y estamos todos ansiosos ya. Ya sabemos que tienes mis labios y posiblemente mi nariz, que te gusta mucho la música, que no te gusta que duerma de lado sino boca arriba, que te encantan las clases preparto y el yoga, que el chocolate y el helado son tu debilidad y que la voz del papa te chifla. No sabes lo mucho que ya te queremos, no sólo nosotros sino todas tus titas y titos y las yayas y yayos. ¡Queremos verte y tenerte en brazos ya!

Ían y yo- 28 semanas

martes, 26 de mayo de 2015

Todo lo que aprendes cuando vas a ser mamá

Hasta ahora, con tanto lío entre la mudanza y mis malestares del principio, la verdad es que no nos hemos puesto en serio a mirar nada para nuestro Mixtito, más que nada porque con el cambio de piso, hay otras prioridades.

Pero ya va siendo hora, al menos de ir mirando cositas y planeando qué queremos comprar y qué no, que con la tontería ya estoy de 25 semanas (traducido para el resto de mortales, de 6 meses y 1 semana :P).

El otro día me puse a mirar qué hay que llevar en la canastilla del bebé. Recomiendan tenerla preparada a los 7 meses, por si se adelanta. Pues bien, me topé con palabras extrañas y desconocidas para mí, como arrullo, polaina, ranita... Menos mal que está el Sr. Google, que todo lo sabe, que si no, no sé qué sería de mí.

Poco a poco, ya vamos teniendo pensado qué queremos para la llegada de nuestro Ían. Ahora sólo falta comprarlo poco a poco, si me dejan, porque sus titas de sangre, abuelas y sus titas y titos postizos, lo quieren comprar todo.

De momento, ya nos han comprado/ regalado varias cositas, sobretodo ropita. Sus titos postizos, mis churrys, ya nos han comprado la bolsa de maternidad, con un termo para el bibe y un cambiador portátil a juego. La verdad es que desde que vi la bolsa, decidí que quería esta porque es grande y asequible y está llena de topitos, con lo que me gustan a mí los topos :) Es de Women's Secret. Han sacado ahora una colección para mamás que está súper bien. Yo ya tengo dos camisones y el otro día me probé los sujetadores de embarazo y lactancia y son súper cómodos. Os dejo el enlace de la bolsa aquí, por si queréis chafardear.


Su papi ya está pintando la habitación con una ilusión desmedida. Hemos elegido el verde Mint ya desde un principio, aún sin saber si era Mixtito o Mixtita, porque es un color que nos gusta mucho y es unisex.

Mixtito no para quieto. Suele dormir por las mañanas cuando yo estoy despierta, despertarse un poquito después de comer, se vuelve a dormir y por la tarde noche, más o menos cuando llega su papi a casa, empieza el festival de movimientos varios. Un culazo por aquí, una patada por allá y así sin parar hasta bien entrada la noche. Es un culo inquieto, como sus papis.

A Mixtito le pirran las clases preparto y el yoga. Se vuelve loco. El otro día en yoga, mientras nos ponían una canción muy bonita dedicada a las mamis, os aseguro que parecía que él estuviera bailando. Miraba mi barriga y ésta se movía al ritmo de la música, porque sí, ahora ya no sólo siento sus movimientos, sino que cada vez que se mueve bruscamente, se ven desde fuera. Es muy divertido porque ves como tu barriga hace como pequeños temblores, o que de repente se ve cómo Mixtito da una patada, culazo o manotazo. 

En casa estamos que nos derretimos por él. Mixto tiene una sonrisa constante en la cara y cada día le habla y acaricia la barriga como si él lo entendiera todo. No sé si entiende o no, pero cuando su papi le habla, para mí se para el mundo y pienso en lo afortunados que somos los dos por poder vivir una experiencia como esta. 

Os dejo una foto de mi barriguita, con las pegatinas que vende mi querida amiga Annie en su tienda en Etsy. Aparte de las pegatinas, podréis encontrar otras cositas monas para niños con ilustraciones hechas por ella. ¡Son todas monísimas! Yo estoy enamorada del Planner Semanal. Y podéis visitar su web aquí. ¡Os va a encantar, lo sé!



viernes, 1 de mayo de 2015

Semana 21: Ya sabemos que es Mixtito :)

Hoy retomo de nuevo el tema embarazo. Podría estar horas y horas hablando sin parar del tema, pero tranquilos, sólo serán unos minutos, los que tardéis en leer el post.

Ahora mismo estoy en la época esa de las que todos te hablan cuando estás embarazada. Esa donde por fin lo disfrutas, donde sientes a tu bebé dentro de verdad, en la que notas sus movimientos y en la que empiezas a establecer ese vínculo maravilloso que se establece al ser madre o futura madre.

La verdad es que no sabía que estos sentimientos pudieran existir hasta estos extremos. Evidentemente, sé que ser madre y traer una personita al mundo es algo muy grande, pero no me imaginaba que fuera tan y tan bonito. Y tan intenso.

Primero os voy a dar la noticia de la semana. ¡Ya sabemos que es niño! Así tengo a todo mi entorno, exceptuando a alguna de mis hermanitas, contento y feliz porque todo el mundo prefería niño. Yo prefería niña pero como se dice siempre, lo importante es que esté bien. Y todo está estupendamente bien, de momento, así que no podemos estar más felices.

Mi niño es un fiestero. No para de moverse y encima hace movimientos un poco bruscos, sobretodo cuando yo me relajo y me estiro en el sofá o cuando me tumbo en la cama dispuesta a dormir, para él empieza la fiesta. Pero no me importa, sonrío y miro hacia mi barriguita (que ya no es tan barriguita sino casi barrigaza) y pienso en lo a gustito que tiene que estar ahí dentro.

Cuando fuimos a hacernos la ecografía de las 20 semanas, mi niño no paraba de chuparse el dedo, y vimos como movía los labios y todo. ¿Puede haber algo más bonito en la vida? Creo que no, y si las hay, poquitas y contadas con una sola mano.

Día a día me siento más pesada, lógico, porque mi barriga no para de crecer. Además crece como de repente. Un día me acuesto con un tamaño determinado y me levanto al día siguiente con una diferencia (de más por supuesto) considerable. ¡Es algo alucinante!

El otro día, mi Mixto pudo sentir sus pataditas y su hipo y yo empecé a emocionarme. No sabéis la cara que pone cada vez que lo siente, es súper tierno y claro, yo derramo alguna lagrimilla de la emoción.

Mi Veri, alias mi hermana, pudo sentir por fin a Mixtito el otro día. Si es que es fácil sentirlo porque el tío no para quieto. Ella ya tenía muchas ganas de sentirlo y cada vez que nos vemos, antes de darme dos besos a mí, le da un beso a mi barriga. Y yo pensando: ¿Hola? ¡Estoy aquí! Pero bueno, se lo perdonaré porque es normal que esté así.

Su otra tía, mi Caulli alemana, me manda mensajes de voz para que se los ponga. El otro día me mandó un mensaje y yo se lo puse. Estaba tranquilo pero nada más escucharle, empezó a moverse sin parar. Luego se relajó y a los 10 minutos más o menos volví a ponerle la grabación y volvió a moverse. ¡Es como si reconociese a su tía! Si es que muero de amor...

Supongo que cuando nazca veré y sobretodo sentiré un amor diferente a todos los que he sentido hasta ahora. Tengo muchas ganas de sentirlo. No sé si ya lo estoy sintiendo, creo que un poquito sí. Estoy ansiosa por verle la carita y poder tocarle y sentirle conmigo. Y así saber lo que realmente es el amor de madre.

¡Ían, tenemos muchas ganas de conocerte!

Mixtito y yo en la semana 19



sábado, 11 de abril de 2015

4 años sin mi Nany

Parece mentira cómo pasa el tiempo. Sin casi ni darme cuenta, ya han pasado 4 años desde que te fuiste, mi pequeña Nany.

Sigo pensando mucho en ti, todos los perros que veo me recuerdan a ti, aunque físicamente sean muy distintos, pero siempre hay algo que hace que se encienda la bombilla "nanil" en mi cabeza y haga que piense automáticamente en ti.

No sólo los perros me recuerdan a ti. No valoras las pequeñas cosas que compartes con alguien hasta que ya no está junto a ti. Cuando me como un yogur, pienso en dejarte un poquito para que cuando acabe, metas tu pequeño morrito dentro, lo relamas y lo dejes limpito. Cuando abro la puerta de casa, y mira que ya no vivo en la misma casa donde compartimos tu vida, hay días que miro al suelo y tengo la sensación de que vas a aparecer y vas a lanzarte sobre mí, moviendo tu cola sin parar y montando la fiesta de bienvenida que me montabas todos los días. Si paso por Glòries, pienso en la tienda donde te recogimos cuando tan sólo eras una bola de pelo con dos ojos gigantes y saltones, con los que nos mirabas sin perdernos de vista a ninguna. Cuando vuelvo al barrio y paso por el parque del río, recuerdo nuestros paseos largos por ahí, recuerdo cómo disfrutabas sin correa investigando cada rincón del parque, mientras yo en un banco leía algún libro interesante, aunque lo que me ha dejado huella de ese parque es el día en el cual te tiraste al río y empezaste a nadar con tus patitas cortitas, tan feliz que casi podía ver una sonrisa en tu pequeña carita.

Recuerdo lo bien enseñada que estabas, que no comías lo que te dábamos hasta que no te diéramos la orden. Los "hops" que permitían que pudieras subir al sofá o a la cama. Lo a gustito que dormía por las noches contigo a mi lado. Ese verano en Mallorca donde te hartaste a tomar el sol, donde perseguiste un caballo y donde disfrutabas de lo lindo con tus paseos al lado de la playa y donde tú única preocupación era tumbarte bajo el sol, comer y beber. Tus excursiones-escapada. Tus gruñidos defendiendo tu cuna. Tus gruñidos cuando sabías que tocaba ducha. Tus mimos cuando estábamos tristes. Tu mirada de Shrek... Como dice nuestra Caulli, eres la mejor perra del mundo y siempre lo serás.

Hoy hablaba con mi Mixto sobre ti, sobre lo contenta que estarías de tener un nuevo miembro en la familia y lo bien que te llevarías con nuestr@ Mixtit@. Le darías mimos y le protegerías, estoy segura de que lo harías, porque eso es lo que hiciste durante la vida que pasaste con nosotras y con papi.

No puedo parar de llorar escribiéndote estas palabras, pero no me importa. He conseguido no emocionarme cuando hablo de ti, pero cuando recuerdo todo esto, no lo puedo evitar.

Como digo siempre, tú eres uno de los grandes amores de mi vida, y nunca dejarás de serlo y no quiero olvidarte porque pensar en todo lo que hemos vivido juntas, me hace feliz.

Tú cambiaste mi vida, tú me hiciste más fuerte y tu pérdida hizo tambalearse mi mundo hasta límites insospechados, pero aquí estoy, mejor que nunca y hay una parte que te debo a ti. Tú me enseñaste muchas cosas mi Nany y siempre te estaré agradecida por haber aparecido en mi vida. Porque siempre siempre siempre, serás mi pequeña perruna preferida.



domingo, 15 de marzo de 2015

Cuando supe que estaba embarazada

Cuando supe que estaba embarazada, tal como os conté en el post anterior, lo primero en lo que pensé es: “Vaya, en Nochebuena bebí, en la cena de empresa también bebí y en Nochebuena me bebí hasta un Gin Tonic, además de varias copas de vino!!!” Menos mal que en Nochevieja ya no bebí más porque ya sabía que estaba embarazada. También pensé en todo lo que no debería haber comido: Jamón, paté, embutidos varios, etc. No es fácil resistirse a todo esto y más siendo fiestas, cuando comemos como si no hubiese un mañana o como si al día siguiente se acabara el mundo y ya no volviéramos a bebernos una copita de vino o a comernos un buen jamón ibérico nunca más.

Si es que, a quien le gusta el drinking le gusta y yo estoy en este grupo de sobras. Vamos que si hicieran un concurso de quién tiene que formar indiscutiblemente parte de este grupo, yo ganaría el primer premio. No hay nada mejor que una copita de vino para quitar las penas y agobios del día a día o una cervecita fresquita al sol en una terracita un domingo antes de comer, o un buen vermut… En fin, como podréis comprobar me encanta el drinking :D

Aparte del drinking, también me chifla el eating como ya supondréis, y si el eating incluye un buen jamón del bueno, pues claro, ¿para qué voy a sufrir? Podría comer, cenar, desayunar y merendar jamón, no me importaría nada de nada, eso sí, tiene que ser del bueno que yo soy muy fina en ese sentido. Y con los años lo soy cada vez más. Yo no sé cómo me aguanta mi Mixto...

Pensando en todo lo que no debí hacer estando embarazada, la verdad es que me invadió el sentimiento de culpabilidad, tanto que se convirtió en mi pequeña obsesión y empecé a indagar por internet en foros y demás. Poco a poco descubrí que no era la única, que hasta que no sabes que estás embarazada es normal que continúes con tu vida normal y que si algo se ha formado en tu interior, es que lo “malo” que hayas hecho o ingerido, no ha afectado en el desarrollo de tu futuro retoño. Me fui tranquilizando, también con la ayuda de las visitas a mi ginecólogo, quien en cada visita me recalca lo bien que está mi futur@ pequeñín o pequeñina.

La verdad es que tanto Mixto como yo, llevábamos un tiempo pensando en esto, así que con lo precavidos que somos, calculé los meses para poder asegurarme en una mutua y cumplir los meses de carencia para que me cubriera el embarazo. Yo mucho antes, ya había dejado de tomar la píldora anticonceptiva para que mis hormonas se normalizaran un poco y unos meses antes de cumplir con los meses de carencia, fuimos al ginecólogo indicándole que queríamos ser papis, para que me hiciera una revisión y me diera pautas. Me hicieron la revisión y estaba todo bien. También me indicaron que debía tomar yodo desde ya, así que desde ese día empecé a tomar las pastillitas de yodo y que tuviéramos paciencia, que podríamos tardar hasta 1 año en quedarnos embarazados.

Y así, casi de repente, estamos embarazados. ¡Y muy felices de estarlo! No sólo nosotros, no sabéis cómo están las futuras abuelas y abuelos, las futuras titas, los futuros titos y titas amigos… Todos como loc@s, pero loc@s de felicidad y emoción.

Ya estoy casi de 15 semanas, que traducido vienen a ser 3 meses y 3 semanas y por fin vuelvo a ser poco a poco yo. Ya empiezo a coger de nuevo mis antiguas costumbres, miro más las redes sociales, publico más cosillas y lo que más ilusión me hace de todo, es haber retomado este blog. Tengo tantas cosas que contar y expresar sobre esto que cuando empiezo a escribir, no sé cuándo voy a parar. También me han vuelto mis ganas innatas de pasear, ir de tiendas, COMPRAR, y que todo lo que vea para mí o para mi Mixtit@ me encante. Eso sí, intento controlarme que si no, estaría en la ruina, jejejeje.

Al encontrarme mucho mejor, tengo muchas ganas también de hacer deporte, pero como correr no es lo más adecuado en mi estado, he pensado en hacer yoga para embarazadas, que dicen que va muy bien. ¿Alguna habéis hecho alguna vez? Si es así, contadme qué tal que yo estoy como un flan porque en la vida he hecho ni yoga ni pilates.

Ahora estamos ya metidos de lleno en cambiarnos de nidito de amor, ya que el nuestro se queda pequeño y nos gustaría tener una habitación para el bebé. Así podré comprar cositas para decorarla. De momento, ya he encargado a mi Veri una alfombra de trapillo muy mona, con forma de oso. Ya os la enseñaré si le sale bien. No me atrevo a comprar nada todavía porque aún no sabemos si será Mixtito o Mixtita, y claro, aunque hayan colores neutros, los no neutros molan más. Habrá que tener paciencia, porque creo que hasta el quinto mes no te lo dicen seguro, así que me queda poco más de 1 mes de espera.

Estoy ansiosa por que avance un poco más el embarazo y poder sentirl@ dentro. ¡Qué emoción! Espero poder controlarme cuando llegue ese día y no estar llorando todo el día de la emoción de sentirl@ dentro moviéndose o dando pataditas. Ya sabéis que aparte de ser de pronto fácil, también soy de lágrima fácil y soy muy muy sentida.

De izquierda a derecha: Mixtit@ a las 6 semanas, a las 8 semanas y a las 12 semanas.

domingo, 8 de marzo de 2015

Creando una nueva vida

Llevo mucho dándole vueltas a mi coco desbocado, ese que nunca descansa y nunca para de pensar. Me rondaba la idea de borrar este blog, ya que lo tengo muy abandonado y no le presto la atención suficiente. Digo rondaba porque he cambiado completamente de opinión al leer varios posts. Como no, alguna lagrimilla se me ha escapado recordando esos momentos.

Si es que este blog es yo en estado puro, es lo que siento, lo que vivo, los que me rodean y todo mi mundo. Así que sólo me ha hecho falta leer unas cuántas entradas como ésta o ésta otra para decirme a mi misma lo equivocada que hubiese sido esa decisión y para darme cuenta de lo mucho que me hace sentir Kaihattan. Así que aquí estoy para contaros las novedades de mi mundo.

Muchas cosas han cambiado desde el último post que escribí, hablando de mi obsesión runner. Pues bien, primera noticia, he dejado de correr.

Tengo abandonado mi otro blog de recetas, Tupper's Moment hace 3 meses. ¡Por favor, qué rápido pasa el tiempo!

Sabéis lo mucho que me gusta correr y lo mucho que me apasiona publicar recetas en mi otro blog, y me sigue gustando sólo que estos meses han sido durillos. No os asustéis que estoy bien y no pasa nada grave, al contrario y supongo que por el título de la entrada ya os lo imaginaréis... Si todo va bien, Mixto y Mixta tendrán en Septiembre un pequeño Mixtit@!!! (a partir de aquí ya estoy escribiendo con lágrimas saliendo de mis ojos).

Ya han pasado los primeros 3 meses y parece que mi cuerpo se va normalizando, aunque no estoy del todo fina aún. En estos meses, es como si hubiese sido otra persona por completo sobretodo porque me encontraba fatal, con náuseas, muchos mareos, cansancio extremo y hormonas que suben y bajan, van y vienen cuando a ellas les da la gana y si yo ya soy normalmente de altibajos, imaginaros ahora. Todo esto sumado a la mezcla de olores en mis viajes en metro, a los cambios en mis gustos en cuanto a comida y a mis antojos de Mcdonalds y Kentuchy nada normales en mi. 

Por suerte mi Mixto me cuida aún más de lo que ya me cuidaba antes. No puede haber nadie en el Universo mejor que él. Y no habrá mejor padre ni mejor persona con quien pasar el resto de mi vida. Cada día que pasa lo tengo más y más claro.

Estamos los dos en una nube. Sólo pensamos en esto tan grande que nos está pasando y vamos por la calle con una sonrisa tonta dibujada todo el día en la cara. 

El día en que nos enteramos de la noticia, me hice un test a las 4 de la mañana (sí, sí como lo habéis leído) porque no podía dormir y me encontraba fatal. Y...¡tachán! "Embarazada 1-2 semanas". Se me quitaron todos los males de golpe y la sonrisa tonta que voy arrastrando desde entonces empezó a dibujarse en mi cara. Mi Mixto dormía y no quería despertarle porque al día siguiente teníamos que ir a trabajar los dos, así que me quedé en la cama, con los ojos abiertos como platos en la oscuridad y conteniendo mi emoción para evitar hacer ruido y no despertar a mi Mixto. Pero Mixto como sabía que no me encontraba muy bien, se despertó no mucho después y me preguntó: "¿Cómo estás?" Y yo le contesté: "Estoy embarazada" :) Ya os podéis imaginar que esa noche ya no dormimos más, estuvimos hablando y hablando sin parar y a mi Mixto por supuesto, también se le dibujó la sonrisa tonta desde entonces.

La verdad es que estamos muy muy ilusionados y muy contentos de lo que nos está pasando. ¿Quién iba a decir cuando nos conocimos que después de 4 años juntos íbamos a ser papás? Como digo yo siempre, de esto sólo podía salir algo bueno. Yo ya no me imagino sin mi Mixto y sé que vamos a estar siempre uno junto al otro, superándolo todo, lo bueno y lo malo. 

He decidido contároslo en este post porque nos es imposible dar la noticia a todos uno a uno, y también porque me apetecía. Y a una embarazada no hay que negarle nada, jejeje :P

Por hoy, ya no me enrollo más, pero tranquilos que en los próximos posts sólo voy a hablar de esto porque evidentemente sólo pienso en esto tan bonito y lógicamente se ha convertido en mi nueva obsesión. ¡Y qué bonita obsesión!

PD: ¿Qué os parece el nuevo look del blog? :)

Semana 7 de embarazo
Yo en la semana 7

miércoles, 7 de mayo de 2014

Lo que correr me hace sentir.

Hace miles de años que no escribo aquí. Estoy inmersa en mi otro blog, totalmente distinto a este, Tupper’s moment, y con el poco tiempo que me sobra, no me da para dedicarme a este blog.

Es una pena, porque el otro día leyendo mis posts antiguos noté la esencia del por qué empecé con esto. Lloré, reí y me emocioné con muchas de las cosas que cuento en este blog.

Hay de todo: desamor, amor, Nany, familia y más amor. Mi vida está llena de amor y estoy muy feliz por ello.

Supongo que al estabilizar todos mis sentimientos, no siento tanta necesidad de escribir, de plasmar en la pantalla lo que se me pasa por la cabeza, porque amorosamente hablando, no puedo estar más tranquila y relajada. La palabra que mejor describe mi estado amoroso actual es paz. Esa paz me hace seguir hacia delante, me hace darme cuenta de todo lo bueno que hay en mi vida y me hace sentir la más feliz de la Tierra. Pero que tenga esa sensación, no quiere decir que deje de sentir o de tener altibajos emocionales respecto otras cosas. Ya sabéis que yo soy muy sentida.

Voy a intentar retomar este blog, porque creo que es algo que empecé con mucha ilusión y quiero seguir haciéndolo. Y la prueba de ello es lo que me ha hecho sentir el leer todo lo que he escrito aquí desde hace tiempo.

Una de mis obsesiones actuales es el Running. Quiero retomar el blog con este tema porque creo que actualmente, aparte de mis amigos y familia por supuesto, el correr es lo que más me está haciendo sentir. Sentir y emocionarme.

Con la tontería, llevo poco más de 1 año y medio corriendo, en octubre haré 2 años ya. En este tiempo, he comprobado en mis carnes cómo mi cuerpo se adapta casi sin rechistar a lo que yo le proponga. Al menos en mi caso, supongo que no en todos los casos es igual.

Si me hubieran dicho hace unos años que voy a correr mi 4ª cursa ya, la verdad es que no me lo creería. Más que nada porque nunca me ha gustado correr. En el instituto nos obligaban a correr en gimnasia y recuerdo que posteriormente intenté hacer running también, pero al no gustarme nada, acabé desistiendo nada más empezar. Y me apunté al gimnasio.

Pero en octubre de 2012, decidí probar de nuevo. Porque en esa época no dormía bien y necesitaba desestresarme de alguna forma. Soy muy nerviosa y en el trabajo paso mucho estrés y presión, por lo que, acostumbrada a ir al gimnasio desde siempre para poder soltar la tensión acumulada con clases de spinning o step y pasar a no hacer nada más que las tareas diarias, mi cuerpo me estaba pidiendo a gritos que hiciera algo. Pensé inicialmente en apuntarme al gimnasio, pero no era viable por falta de tiempo. Ir al gimnasio implica mucho más tiempo que salir a correr. Son mínimo 2 horas, entre la clase y la ducha, así que me decidí por correr, ya que aprovechaba mucho más el tiempo y no me supondría tanto tiempo como el gimnasio.

Así empezó todo. ¿Cuántos kilómetros hice mi primera vez? Exactamente 2 kilómetros y medio. Y a finales de Noviembre ya había llegado a los 6 kilómetros. A partir de entonces hice varios parones, uno por Navidades y otro en Febrero, no recuerdo por qué, pero ya había adquirido una nueva necesidad: Correr. En Abril retomé más seriamente el tema y ya continué hasta finales de Junio, con dos salidas por semana y haciendo entre 6 y 7 km. por salida. Hice otro parón en verano. El calor y humedad de Barcelona me pueden, y no me veía capaz de correr en verano. Prefería estar en la playita, bajo el sol o en el chiringuito con una buena cerveza en la mano :)

No me preocupaba el parar porque sabía que iba a volver en cuanto se acabara el verano. La necesidad de correr estaba ya implantada en mi cabeza y hiciera lo que hiciera, sabía que volvería, sin lugar a dudas. Y así fue. En septiembre, me volví a poner mis súper bambas (digo súper en tono irónico, ya que me compré unas bambas muy normalitas para empezar, porque no sabía si continuaría con ello, y gastarme 100-200 euros en algo que no sé si voy a aprovechar, no) y otra vez a correr. Me costó coger ritmo, pero a finales de Noviembre, concretamente el día 29 de Noviembre de 2013, hice mis primeros 10 kilómetros.

No me lo podía creer. Por mi cabeza pasaron esos pensamientos de cuando hacía 3 o 4 km., pensamientos que decían “nunca llegaré a los 10 km. Es imposible”. Y ahí estaba yo, más feliz que una perdiz con mi logro. Con esto, vi cómo si te propones algo y luchas por conseguirlo, al final lo consigues. No podía estar más orgullosa de mi misma.

Ese día de Noviembre ha cambiado mi vida totalmente. Ya desde ese día, cada vez que salgo consigo los 10 km., sin ningún tipo de problema. Eso no quiere decir que no me canse ni que no me cueste, porque me canso mucho y me cuesta otro mucho, sobre todo después de trabajar todo el día, de dejar la lavadora puesta, de tener que pensar en lo que voy a tener que cocinar cuando llegue a casa para el tupper del día siguiente y para la cena de esa noche, entre otras muchísimas cosas. Pero es que correr no es solo correr. Son muchas otras cosas.

Cuando corro no pienso en casi nada, sólo en correr, en escuchar la música que suena en mis cascos y muy importante, en intentar cantar lo que oigo. Sí, sí, un día de estos me tengo que grabar porque cantar mientras corres es complicado. Vamos a poner “cantar” porque más que eso es emitir palabras con ahogos respiratorios entre medio. :P Y cuando el ahogo me impide emitir sonidos, canto mentalmente. Pero no pasa nada, yo canto y corro a la vez y mientras corro, miro lo que hay a mi alrededor, como si no lo hubiera visto nunca. Y cuando la chica del Endomondo me habla y me dice “ 1 km en X minutos, tiempo previsto X minutos o horas”, paro de cantar y escucho atentamente y pienso, vamos Kai, ya queda nada. Y a lo mejor me quedan 9 km…

Correr no es solo correr porque si no, todo el mundo correría. Es algo muy físico sí, pero muy mental a la vez. Todas las veces que salgo a correr pienso, no puedo más, voy a parar. Quiero parar pero no lo hago, porque sé que puedo seguir y acabar. Sé que el demonio de “quiero parar” siempre estará presente en mis salidas y tengo que aprender a luchar contra él. Y eso hago cada vez que salgo, luchar contra el demonio este maldito.

Lo mejor de esto es el cómo te sientes después. Conseguir lo que quiero corriendo se puede trasladar a muchos aspectos de mi vida. Correr hace que me sienta más segura, más capaz aún de todo lo que me proponga, me hace sentir fuerte (aunque soy una debilucha en verdad y lloro con nada) y por encima de todo, me hace sentir libre. Libre de todo cuando corro, libre de malos rollos, malos pensamientos, libre de todo lo malo que haya podido pasarme en el día, en la semana, en el mes e incluso en mi vida. Correr es la motivación que necesito para un día malo. Cuando tengo un día malo pienso, “no pasa nada. Luego salgo a correr y se me pasa” y voy alimentando mi deseo de correr. Evidentemente, cuando llego a casa, aunque esté hecha polvo, mi motivación para salir a correr es máxima, porque llevo todo el día alimentando esa necesidad de salir a correr.

A veces estoy tan cansada, que pienso, “venga va, salgo pero solo un poco”. Y tachán, hago mis 10 km. de siempre. No puedo evitarlo :)

Como me vi tan capaz de hacer 10 km. sin problema, teniendo en cuenta que por mi zona hay muchas subidas y bajadas y no es una ruta fácil, me animé a apuntarme a una cursa popular, no muy multitudinaria. Me apunté a la Cursa popular de Sant Antoni y sólo con deciros que nada más cruzar la meta, empecé a llorar como una magdalena de la emoción, os lo he contado todo. Hacía mal día, llovió bastante durante la noche y parte de la mañana pero no parecía que fuera a llover más, hasta 10 minutos antes de la salida, que es cuando empezó a llover no, a diluviar y así 5 kilómetros. Llevaba una sudadera de algodón, no impermeable y claro, la lluvia hizo que pesara por lo menos 2 kilos más, porque no os exagero, no podía llover más. Encima no veía casi nada, porque mis gafas se empapaban cada 10 minutos. Al principio me las iba limpiando, pero al final opté por no hacerlo porque enseguida volvían a empaparse. Menos mal que a partir del kilómetro 5 paró, y salió hasta el sol. ¡Qué cosas! Ya podría haber salido antes. Mi primera cursa y la hice en menos de 1 hora, en 59:20 minutos. No podía sentirme mejor en ese momento.

Mi súper fan, mi Mixto, aguantó el chaparrón como un campeón y encima, además de aguantarlo, me animaba como el que más. Y me sigue animando cada vez que salgo a correr. Me felicita en todas mis salidas y me pregunta que cómo me ha ido e incluso, si le pillo en casa, me espera en la puerta y mientras subo las escaleras, ya me está aplaudiendo y diciendo palabras de ánimo. Y en casa, tengo mi isotónica preparada con mi pajita, para bebérmela nada más me quite las bambas.

Es el mejor. No puede animarme más. Es mi mayor apoyo y mi mayor motivación. Me acompaña a las cursas con una ilusión desbordante y con una sonrisa gigante en la cara. Y os aseguro que es difícil, madrugando un domingo. Me calma, me sigue animando camino a la cursa y cuando la acabo, me hace sentir como la ganadora total. Me hace sentir la mejor. Sin su apoyo, no sería lo mismo. Sin sus palabras, tampoco sería lo mismo. Correr es algo que hago porque me gusta, me engancha, me motiva, pero gracias a él, todas estas emociones se multiplican por mil. No sólo eso. Creo que algo está cambiando. A la última cursa ya no fue como espectador. Hizo una cursa de 5 km. Mi Mixto está empezando a correr de nuevo. Y algo me dice a mí que pronto, muy pronto, lo tendré de compañero de cursas. Podré emular tantas fotos bonitas que he visto últimamente: Cruzar la meta de la mano los dos o darnos un beso en medio de la cursa para animarnos mutuamente. Todo llegará, estoy segurísima de ello :D

Foto de mi última cursa, la Cursa Nocturna de L'Hospitalet. Tiempo real: 57:29


lunes, 1 de abril de 2013

1 año viviendo juntos.

Hoy no estoy muy inspirada, pero quería hacer mención de un acontecimiento muy importante para mi, para nosotros.

Hoy, justa y exactamente hoy, hace 1 año que empezamos a vivir juntos, a dormir juntos todas las noches y a compartir casi todos los momentos de nuestros respectivos días.

Hace 1 año en el cual no hemos dormido separados ni un sólo día. No sé vivir ya sin mi Mixto y el día en el cual mi Mixto viene más tarde a dormir, no puedo dormir bien hasta no saber que ya está a mi lado durmiendo.

Él es mi calma, con él no tengo que preocuparme por nada, porque sé que él me protegerá de todo. Y me cuida como el que más, y me mima como nadie podría mimarme nunca y me quiere, me quiere de verdad.

1 año en el cual hemos sabido adaptarnos el uno al otro, 1 año en el que han pasado muchísimas cosas, casi todas buenas.

Espero que pasen muchos más, de hecho sé que así será. Porque mi vida sin ti ya no sería vida, sería algo malo, malísimo. Lo único que sé es que no quiero separarme nunca de ti. Te quiero un mixtal, Mixto de mi vida.

Una de nuestras primeras "autofotos"


martes, 26 de febrero de 2013

Mixto y Mixta se van de vacaciones: Viena, Bratislava y Budapest.


Fuente de Viena (Fuente imagen: http://praison.net/viena-la-capital-de-austria/fuente-de-viena-austria/)

Por fin Mixto y Mixta tienen las fechas de las vacaciones de verano confirmadas, por lo que Mixta se puso a mirar por la red donde comprar los billetes más baratos. ¡Y ya los tienen comprados!
En un principio, la ruta que querían hacer Mixto y Mixta era comprar un vuelo de ida y vuelta de Barcelona- Viena, Viena- Barcelona, ya que salía más económico, aunque era bastante más ajetreo porque después de visitar Budapest, deberían coger un tren de vuelta a Viena y coger el avión a Barcelona. Por lo que finalmente, decidieron volar a Viena desde Barcelona y volver a casa nuevamente desde Budapest, la úlitma ciudad de la ruta. Es algo más caro, pero así iran más relajados y tranquilos.
Después de pasar 3 noches en Viena, el próximo destino sería Bratislava, y harán el recorrido que separa estas dos ciudades en barco, surcando el Danubio. Mixto tendrá que abrigarse y taparse, ya que si se mojara en las aguas del Danubio, perdería muchas migajas, y no sería bueno para su salud. Mixta le cuidará, para que todo salga bien.
Como Bratislava es rápida de ver, pasaran 1 noche allí solamente y al día siguiente cogerán un tren destino Budapest.
En Budapest pasarán 3 noches enteritas.
Sólo les falta comprar los billetes de barco y tren, y reservar los hoteles en Bratislava y Budapest, ya que el de Viena ya está reservado, gracias a las recomendaciones de la hermana de Mixta, que ha estado allí hace no mucho.
Y con todo esto, Mixto y Mixta están felices y deseando que llegue julio. No puede ser Japón, como ellos querían, pero el prósposito no se anula, sino que se pospone. Si todo va bien, Mixto y Mixta iran a Japón en 2014. Pero de mientras, Mixto y Mixta conocerán 3 ciudades juntos. 3 ciudades de las muchas que les quedan por conocer…
¡Buen viaje!

domingo, 10 de febrero de 2013

Un mixtal, nuestra unidad de medida.

Hace ya 2 años de Mixto y Mixta. Y aunque el tiempo no es importante si tienes pensado pasar tu vida con Mixto, siempre es bonito celebrarlo y recordarlo.

Recordar ese momento siempre apetece. El momento en el que nos dimos nuestro primer beso, el momento en el que nos dimos por primera vez la mano, el momento en el que decidimos compartir muchos momentos juntos.

No había imaginado nunca que fuera a acabar así, así de bien.

Cuando conocí a Mixto yo no lo veía como ahora lo veo, por supuesto. Pero fueron nuestros encuentros, nuestras largas conversaciones y nuestros pequeños ratos, los que poco a poco hicieron que esto fuera posible y ocurriera.

Porque tiene que ser fácil, si tiene que pasar, pasa, sin tener que forzar. Y eso es lo que pasó. 

Porque Mixto y Mixta están destinados a estar juntos. 

Porque Mixta no imagina una vida sin Mixto. Porque cuando Mixto está triste, Mixta también. Porque cuando a Mixta le duele algo, a Mixto le duele mucho más. Porque cuando uno se cae, el otro lo levanta. Porque cuando pasa algo malo, ya no pienso en "quiero a mami", pienso en "quiero a mi mixto"...

Y por eso Mixto, no puedo decirte que te quiero mucho, se queda corto. Y por eso inventamos una nueva unidad de medida para lo nuestro, te quiero un mixtal, Mixto de mi vida.


Una de nuestras primeras fotos juntos, en Montmeló.

sábado, 12 de enero de 2013

Resumen del 2012

Llevo días, incluso semanas queriendo hacer este post. No he podido o no me ha apetecido hasta hoy.

Es el típico post, típico y tópico, pero me gusta. Está bien mirar un poco para atrás y ver todas las cosas que han pasado en mi vida en el 2012. Mi palabra para este año sería cambios, o independencia, o felicidad, o amor...Bueno, creo que no soy capaz de definir el 2012 con una sola palabra como podéis ver, así que voy a comentarlo, largo y tendido, como a mi me gusta. Que las palabras no cuestan dinero y de momento, aún son gratis.

Quienes me conocéis, sabéis que tengo muchísima memoria, me acuerdo de muchas cosas y de muchos detalles, pero evidentemente, este año 2012 ha destacado por un simple hecho: la independencia con mi Mixto. Tras esa independencia y un pequeño periodo de adaptación, la felicidad, mezclada por supuestísimo con amor, mucho amor, amor que ya sentíamos el uno por el otro antes de vivir juntos, pero sobretodo respeto, compatibilidad de caracteres (aunque el mío es fuerte y complicado y aplaudo su paciencia y nivel de aguante hacia mi), paciencia, y el sentimiento de saber que él es la persona con quien quiero seguir así, con quien quiero compartir todos los momentos de mi vida, buenos o malos, con quien quiero todo y muy importante (y es una frase que él dice mucho y le gusta mucho), con quien quiero envejecer.

No sería capaz de levantarme sin él, dormirme sin él...no sería capaz de nada si no le tengo a mi lado, junto a mi. Sé que hemos tenido nuestros más y menos al compartir nuestra vida debajo de un mismo techo, pero creo que todos esos más y esos menos, han concluido por unirnos cada día más. Ya casi no necesitamos tantas palabras para decirnos las cosas, con mirarnos, a veces, es más que suficiente.

Este año ha sido en general bueno para mi, no tanto para mis pequeñas, mis niñas. Yo por ellas, lo que haga falta. Sabéis que para mi son como un trozo de mi y si ellas sufren, yo también.
Me he dado cuenta que son casi perfectas, son buenas y sobretodo son muy responsables y maduras. Y fuertes. Ya no son tan pequeñas y tan indefensas. Son 3 pedazo de mujeres, hechas y derechas y de las cuales estoy orgullosa no, lo siguiente. Las quiero demasiado y me siento muy afortunada de tenerlas. Y en este 2012 me han demostrado mucho. No son buenos momentos, pero juntas lo superaremos todo todito todo. No se nos resistirá nada ni nadie, hermanitas. A mi Caulli, a mi Veri y a mi Minyita, os adoro.

¿Qué más puedo destacar este 2012? Pues tantos y tantos ratos buenos con vosotros, sí sí vosotros, con quienes estamos todo el día pensando en dónde ir a comer la próxima vez, pensando en hacer algo guay o simplemente, tomarnos un gin tonic de esos que nos gustan tanto. Somos unos gordos (de pensamiento, eh? que estamos todos estupendos) pero por vosotros aguanto toda la semana, sois mi motivación. Porque sé que cuando llegue el finde, nos veremos, comeremos algo rico y si se tercia nos tomaremos algo también. Y todo esto entre risas, anécdotas y sobretodo amistad. Y todo lo malo que haya pasado durante la semana, se esfuma. Espero que en este 2013 sigamos así, seguro que sí, no lo dudo. De hecho, ya hemos empezado :P Os quiero, mucho. Gracias por soportarme también (vosotros ya me entendéis) y gracias por ser como sois.

Otra cosa a destacar, el cambio laboral de mi madre. En septiembre decidió poner fin a su corta vida de asalariada y montar su take away, conocido ya entre nosotros como "Mamakai". Me encanta, y sobretodo porque va bien. Creo que va muy muy bien en los tiempos que corren. Y me siento genial por ella, por mi mami. Seguro que en el 2013 le irá igual o mejor.

¿Qué más? La vuelta de mi Vic, la huida de mi Montse. El trineo de perros. Andorra. Les Borges Blanques. La súper sorpresa del cumple de Mixto. Shunka por mi cumple. Playa, AmpuriaBrava, L'Ampolla, el Gangam Style por Les Borges Blanques y en Nochebuena, Nochebuena por primera vez en casa, Nochevieja con la family de Álvaro... Me olvido de muchas cosas, momentos y sitios, pero para mi lo más importante de 2012 ha sido lo inmensamente feliz que he sido y lo querida que me he sentido. Ni sitios ni momentos. Sentimientos.




miércoles, 26 de diciembre de 2012

Carta para ti

Aún pienso en ti. No hay día en el cual no lo haga, pero en estas fechas se acentúa más. Despertarme el día de Navidad y tenerte como primer pensamiento, sentir que te echo de menos, que quiero tenerte a mi lado, pero al no ser posible, pienso en todos los buenos momentos que pasamos juntas y, me vuelvo a dormir con una sonrisa dibujada en mi cara.

No te vemos con nosotras pero sé y siento que estás presente en cada una de nuestras vidas, como has estado desde hace 14/15 años. Nos observas desde arriba, y  te alegras en nuestros momentos buenos o te entristeces en nuestros momentos malos.

La gente me mira raro cuando hablo de ti. Yo creo que piensan: "Pobrecita, no lo va a superar nunca". Pero se equivocan. Hasta no hace mucho, se me llenaban los ojos de lágrimas al hablar de ti, al pensar en ti. Porque te quiero tanto que no estoy acostumbrada aún a estar sin ti, a vivir sin ti. Pero poco a poco, esas lágrimas se están convirtiendo en sonrisas, porque Mixto me da muy buenos consejos y me dice siempre que sustituya mis pensamientos de tristeza por no tenerte junto a mi por buenos momentos que hayamos pasado juntas y siempre me dice que te imagine allá donde estés, feliz, observándonos a todas y sobretodo, tranquila, sana y sin dolor. Esto me alegra y hace que mi sonrisa sea grande no, gigante, ya que pasaste mucho sufrimiento al final de tus días...

Y digan lo que me digan, no me olvidaré nunca de ti, nunca, porque he compartido tantas cosas contigo que sería imposible olvidarte.

Recuerdo tantas cosas contigo que no acabaría nunca, pero voy a dejar imágenes, que dicen que una imagen vale más que mil palabras...

Te quiero y nunca dejaré de hacerlo. Te echo de menos y no dejaré de hacerlo nunca tampoco. Y sobretodo, te recuerdo, todos los días de mi vida.

Nany, tú serás ya para siempre uno de los grandes amores de mi vida. Este es otro de mis pequeños homenajes para ti.

Día en el que Nany estuvo malita y estuvimos juntas el día entero en la cama.

Día en el que Veri le llevó a la playa a jugar con las olas.

Día de veterinario: no le gustaba nada.



Su deporte favorito: dormir.


Y mi favorita: nosotras dos.




domingo, 2 de diciembre de 2012

Espíritu navideño

Se acerca la época del año más esperada para algunos, sobretodo para los más pequeños de la casa, la Navidad.

Yo nunca he sido muy navideña, no me ha gustado demasiado, la verdad. Sólo me gustaba porque nos reuníamos la familia, en mi caso con mis hermanas a cenar cosas ricas y a beber cava juntas.

Este año la situación es diferente. La persona con la que vivo no es navideña, no, lo siguiente. Ve luces de colores, se le encienden los ojos y me mira diciéndome que le encanta la Navidad. Aparecen en la tele los típicos anuncios navideños y suelta un "me encantan este tipo de anuncios. Son magia". O bien vamos al supermercado y va a toda prisa a la sección de bombones Lindt y empieza a decirme qué caja de bombones compraremos cuando nos acabemos la nuestra... Podría seguir enumerando diferentes situaciones que demuestran que lleva el espíritu navideño muy adentro, pero no acabaría nunca.

Pues bien, me lo ha contagiado. Me paro a hacer fotos de las luces navideñas que veo en la calle, me hace ilusión comprar cosas para decorar la casa, siento un impulso inexplicable en querer comprar regalos para todos...Tampoco me he resistido mucho, la verdad. Todo lo que sea comprar, me gusta. :P

Luces en Calle Mandri (Barcelona)
Este fin de semana ya hicimos las compras navideñas necesarias para montar nuestro árbol y...ya lo tenemos montado. De hecho me ha contagiado de tal manera, que no paro de mirar las lucecitas del árbol una y otra vez mientras veo la tele y de pensar qué más podría comprar para completar un poco más el árbol.

Pegatinas de Hello Kitty navideña, una de las compras que hicimos.
La verdad es que me gusta. Buscar cosas para montar el árbol, no me ha gustado no, me ha encantado. Sobretodo por verlo a él, con esa ilusión en los ojos y disfrutando de todo lo que conlleva esta fiesta.. Nunca había montado ningún árbol de navidad y éste es el primero, el primero de muchos espero.

Nuestro árbol de Navidad
Ahora nos falta comprar regalitos para nuestra numerosa familia (sobretodo por mi parte) y cenar todos juntos en nuestra casa, por primera vez. Y ver las caras de mis niñas y niños, de mis hermanas y hermanos al abrir los regalos, ver como la pequeña al beber se pone morada en lugar de roja, y sobretodo, de compartir risas y más risas con ellos. Estoy emocionada, emocionada y feliz.

No puedo estar mejor, no pido nada más. Porque todo lo que quiero para Navidad, eres tú.